jueves, 26 de diciembre de 2013

NOTICIA: 'Las navidades pasadas'.

Los archivos históricos provinciales de Castilla y León ofrecen una exposición virtual con las imágenes de la Navidad en las diferentes provincias de la Comunidad.
eonoticias.com
Imagen de dos pequeños en una foto recuperada del Frente de Juventudes 
Con 'Las navidades pasadas'. Sus imágenes y sus recuerdos, en blanco y negro, forman parte de los catálogos que se encuentran en los archivos históricos provinciales de Castilla y León.


Natividad de la imprenta Casado de León.
Ahora estos archivos ofrecen una exposición virtual con las mejores imágenes de la Navidad con el que pretende mostrar los recuerdos de tantas Navidades vividas en los pueblos y ciudades de la Comunidad.

La máquina del castañero en la calle
D. Gutierre de León.
 A través de las fotografías que se encuentran entre los Fondos de la Delegación Provincial de la Sección Femenina y de la Jefatura Provincial de Movimiento (entre otros) de los  Archivos Históricos Provinciales  de Castilla y León, se rememoran las tradiciones navideñas de las generaciones pasadas.

Belén viviente
Navidad en la Casa Cuartel de León
Los Reyes Magos
Regalos y Reyes Magos
Imagen de la tradicional Calbalgata de Reyes.
Tradiciones centenarias que, pese a los importantes cambios que ha vivido la sociedad en los últimos cincuenta años, no se alejan tanto de las que ahora siguen presidiendo nuestros hogares en estas fechas.

 Los Reyes Magos en el  hospicio

Son imágenes para el recuerdo que merece la pena ser vistas.


domingo, 22 de diciembre de 2013

NOTICIA: Un Patrimonio en el pozo

El Pozo de Ibarra ingresa en la Lista Roja sólo días después del palacio de Orallo y la iglesia de Valdavida

verónica viñas | león 22/12/2013
El Patrimonio leonés se hunde. El Pozo Ibarra, emblema de cien años de historia minera, es el tercer BIC que ingresa este mes en la Lista Roja, una relación de construcciones en ruina. León tiene ya en esta nómina 18 monumentos, aunque la realidad es más cruel. Sólo Soria y Palencia están por delante en un ránking que evidencia el desmoronamiento de iglesias, ermitas, castillos, palacios y, ahora también, el patrimonio industrial.
El impresionante castillete del Pozo
 Ibarra, una especie de ‘torre Eiffel’ de la minería
secundino pérez
El Pozo Ibarra de Ciñera está en la lista de Hispania Nostra a petición de Ecologistas en Acción, porque corre el riesgo de desaparecer, «por enterramiento», bajo la escombrera de la explotación de carbón a cielo abierto Corta Pastora que hay a escasos metros y que la Hullera Vasco-Leonesa prevé ampliar. La empresa minera había planificado desplazar 200 metros el imponente castillete del Pozo Ibarra, auténtica obra maestra de la ingeniería de su tiempo (1930), una especie de ‘torre Eiffel minera’, pero los ecologistas consideran que ello supondrá «descontextualizarla».
El castillete con el ascensor de bajada a la mina, formado por una estructura de hierro, se mantuvo en uso hasta 1997 y fue declarado BIC con categoría de Conjunto Etnológico en 2011.
En el Diario de León de la época, a propósito de la inauguración del pozo se publicó lo siguiente: «Es un modelo de instalaciones modernas, pues van completamente aunados la instalación industrial con todos los adelantos modernos y el confort obrero, haciendo que un minero, después de terminar su labor, al abandonar las negras entrañas de la tierra, se encuentre con un cuarto de aseo donde puede quitarse la suciedad y llegar a casa tan decente como si viniera de una oficina». Ahora, 83 años después, el conjunto industrial goza de la máxima protección y tutela que reconoce la legislación de Patrimonio Cultural, de ahí que los ecologistas consideren que «no tiene amparo legal la pretensión de la Hullera Vasco Leonesa de preservar únicamente el castillete del pozo, separándolo del conjunto para reubicarlo en otro lugar, destruyendo el resto de los inmuebles protegidos por la declaración, así como el suelo y subsuelo donde se asientan».
Todo un ingenio
El pozo de Ciñera se encuentra en unos terrenos donde ya se explotaba el carbón en el siglo XIX. Según el espléndido archivo de la Hullera —con más de un kilómetro de documentos— Francisco Miñón vendió su concesión a los socios de Hulleras de Ciñera, una sociedad que se constituye en Bruselas en 1900. La compra de Hulleras de Ciñera en 1910 por 1.195.000 pesetas a Enrique Faura fue la primera operación de gran envergadura de la Hullera Vasco-Leonesa para crecer de tamaño y afrontar una organización más compleja.
En 1929 el informe del ingeniero Mario Zapatero —que con anterioridad había trabajado en Duro Felguera— describe que el ‘pozo maestro’ tiene ya una profundidad de 112 metros y también alude al castillete, cuyo peso estima en 55 toneladas y un coste de 50.000 pesetas.
En 1930 se termina de profundizar el pozo en los 150 metros proyectados, se terminan las casas de máquinas y oficinas y se monta la máquina de extracción, así como el castillete, obra de Construcciones Juliana (Gijón). La inauguración del pozo se produce en noviembre por el recién nombrado presidente de la Hullera, Francisco de Ibarra, que acababa de llegar al cargo al fallecer en agosto el marqués de Mac Mahon.
El pozo también sufrió el zarpazo de la Guerra Civil. En septiembre de 1937, fue escenario de enfrentamientos entre ambos bandos. Hubo muertos y las instalaciones fueron destrozadas e incendiadas.
Ahora, el Conjunto Industrial del Pozo de Ibarra figura en la Lista Roja de Hispania Nostra como «abandonado» y «en proceso de desmantelación». Este mismo mes la Lista Roja de Hispania Nostra admitía otras dos construcciones en un delicadísimo estado de conservación: el palacio de Orallo y la iglesia de Valdavida

miércoles, 18 de diciembre de 2013

EDITORIAL: El Ramo Leonés.

El RAMO LEONÉS es uno de los representantes más significativos de la religiosidad popular leonesa formando parte de la tradición y la identidad propias, gozando actualmente de una salud envidiable gracias a la recuperación por parte de todos los leoneses que lo reincorporan en sus hogares, oficios y comercios en la Navidad.



Los orígenes del Ramo se remontan hasta momentos prehistóricos precristianos, donde el ramo o rama de árbol tenían un carácter votivo como posible culto a la fertilidad de la naturaleza acompañado a veces de frutos y del fuego u objetos encendidos (cordeles engrasados o encerados, teas, etc.) También se le atribuye un culto propiciatorio asociado a la solicitud de buenas cosechas.

Según Concha Casado el soporte donde se llevaban las ofrendas fue en principio un ramo o rama de árbol, que luego vino a significar la ofrenda misma (de hecho aún existen en la provincia tradiciones relacionadas con la imposición del ramo en épocas primaverales y estivales). Más tarde esta rama se sustituye paulatinamente por un armazón de madera cubierto con adornos naturales y antrópicos.

Existen otros ramos además del de la Navidad (como el de novia, de la virgen, el de patrón/patrona, el de las mozas, el de misacantanos, etc.), si bien su estructura y composición son similares. El Ramo Leonés se compone de un soporte material, normalmente de madera (aunque existe alguno histórico metálico) del que cuelgan ofrendas y adornos (así como otros elementos en torno a él, sobre todo en su base una vez portado). Asociado a éstos se encuentra una parte de oralidad muy importante: la literaria popular e incluso musical, asociando textos y melodías a un complejo ceremonial que puede incluir asimismo danzas.

El soporte de los ramos podía ser una rama vegetal, una vara de madera o los más evolucionados componer formas geométricas o vegetales, en donde el más representado hoy es el armazón con forma triangular, si bien existen más de doce tipos donde destacamos otros como romboidal, circular de copa o de rueda, de margaritina (soporte labrado con un símbolo solar asemejando una flor con muchos pétalos), de cola de pavo real o medio sol, con forma de cubo, de cuadrado etc.


Se denomina vestir el Ramo a adornarlo, lo que hace pensar que parte de la decoración sean telas como cintas de seda, colonias, mantones bordados, puntillas, etc. Pendientes del ramo se solían situar estampas de santos, medallas de devociones marianas. También ramas verdes, flores, imitando en cierta forma la naturaleza primigenia de la rama natural. También se suman las ofrendas que son las que se ofertan al templo tales como las velas y cera, dispuestas de forma similar a los tenebrarios de la Semana Santa. Según Alejandro Valderas, normalmente el número de éstas es impar, aunque asimismo existen los pares de 12, representando los meses del año.

La fruta también se utiliza como ofrenda, habitualmente las relacionadas con el periodo invernal, normalmente manzanas. Asimismo los frutos (del bosque tales como castañas, nueces, avellanas, etc.) y derivados del pan como roscas, rosquillas, tortas, bollos, etc.

El “Canto del Ramo” se realiza el día de Nochebuena en la Misa del Gallo. El desarrollo de la ofrenda comienza con las mozas pidiendo permiso al sacerdote para entrar en la iglesia a cantar el Ramo. El canto normalmente hace referencia al relato evangélico del Nacimiento y la Adoración a los pastores ante el altar. Después se describen las ofrendas para finalizar con la despedida donde se felicita a los presentes. En algunos pueblos se concluye el canto del Ramo con “dichos” o sátiras sobre los acontecimientos ocurridos a lo largo de ese año.

Además del canto del Ramo en Navidad, también se cantaban el Ramo patronal sustituyendo las escenas evangélicas por la hagiografía del santo. El ramo votivo se ofrece por una promesa, se sustituye el núcleo navideño por el relato de un hecho dramático autobiográfico.

Según Alejandro Valderas la utilización del Ramo se extendería por las diócesis de León (provincias de León, Palencia y Cantabria) y Astorga (provincias de León y Zamora). Casi un 20% de las localidades corresponderían a las vicarías de Oviedo (provincias de León y Zamora), la zamorana de Alba y Aliste de la Archidiócesis de Santiago, a la leonesa de la Orden de Santiago (Altobar, Campo de Villavidel) y los territorios en los que un abad hacía las funciones episcopales (Peñalba, Montes de Valdueza).

FELICES FIESTAS Y FELIZ AÑO 2014


Desde el Museo Etnográfico Provincial de León les deseamos
 unas FELICES FIESTAS, 
un PRÓSPERO AÑO NUEVO,
y nuestros mejores DESEOS en este año 2014.
 
"No existe la Navidad ideal, sólo la Navidad que usted decida crear como reflejo de sus valores, deseos, seres queridos y tradiciones."




miércoles, 11 de diciembre de 2013

PIEZA DEL MES: DICIEMBRE 2013

LA CALABAZA: Los símbolos del Peregrino.
Investigador: Adelina Martínez. Guía Cultural del Museo
Sábado, 14 de diciembre 18,00 h.
Patio Espacio Peregrino. Planta baja.
Museo Etnográfico Provincial de León, Mansilla de las Mulas.

Actividad Gratuita


El Programa “Pieza del Mes” de diciembre quiere sumarse a la celebración del XX Aniversario de la Declaración de Patrimonio de la Humanidad por parte de la UNESCO del Camino de Santiago, dedicando esta actividad a “Los Símbolos del Peregrino”, y entre ellos a la Calabaza, como un sistema de porteo personal del agua del caminante.

Desde el siglo IX, con el hallazgo de la tumba de Santiago, la peregrinación al santuario compostelano se extendió por todo el occidente europeo. El culto al Apóstol se incrementa en numerosas iglesias, comenzando a desarrollarse una rica imaginería en la representación del Apóstol Santiago. Hasta ese momento la iconografía del Santo era una imagen sedente, en majestad o in catedra. Se le representa con los atributos  comunes a todos los demás apóstoles: túnica y manto, los pies descalzos, el libro sagrado y una filacteria donde consta el nombre del apóstol con frases alusivas a textos sagrados. Esta iconografía la podemos ver en la escultura del parteluz del Pórtico de la Gloria de Santiago de Compostela (1188).

Debido a la difusión de la historia de predicación de Santiago en Hispania, el descubrimiento milagroso de su cuerpo y su enterramiento en Compostela y más tarde el desarrollo de las rutas de peregrinación, se le comenzó a representar con los atributos propios de los peregrinos que hacían el Camino de Santiago. La primera representación de Santiago como peregrino la podemos ver en la iglesia de Santa Marta de Tera (Zamora). Está representado  con la escarcela o zurrón, concha de peregrino y bordón.
De estos atributos de los peregrinos y de su simbología nos habla el Códice Calixtino (1160). Y a éstos se suman otros que con el tiempo se convertirán en posesión común de los peregrinos.

La escarcela era una bolsa estrecha de piel para guardar alimentos, con la boca abierta y sin atadura. Ésta tenía un matiz simbólico asociado a la generosidad en la limosna y la mortificación de la carne. El bordón, bastón con el que el caminante se apoya al andar y se defendía de las alimañas, refleja un tercer pie con una simbología trinitaria. Otro símbolo específico del peregrino jacobeo es la concha, con simbología precristiana, y que identifica al peregrino que va a Santiago reconocido como tal si la porta, representa la caridad o amor de Dios puesto que semeja una mano abierta.
Otros accesorios funcionales para el peregrino eran la calabaza, como transporte de la bebida, el sombrero, de ala ancha, realizado en diferentes materiales y donde se colocaba la concha. O la capa con esclavina, a veces de piel, que cubría los hombros y se decoraba con conchas y bordones de materiales diversos.

Finalizará la exposición hablando de la importante función que cumplían los monasterios ubicados en el Camino de Santiago. Al tratarse también del Museo Etnográfico Provincial de León ubicado en lo que fuera un antiguo monasterio fundado en 1491 por D. Fadrique Enríquez, Almirante de Castilla, que se lo entrega primero a los siervos de María y luego en 1500 a los agustinos, muy relacionados con la casa de peregrinos, cerca del convento. Éstos a su vez como misión también atendían a los peregrinos a los que proporcionaban no sólo hospedaje, sino también atención espiritual y sanitaria.

ACTIVIDAD REALIZADA
 
 
D. José Ramón Ortiz , Director MEPL,
D. Javier Cachán Asociación Camino de Santiago
 Dª Adelina Martínez , Guía MEPL.
 
D. Javier Cachán y Dª Adelina Martínez
 
Dª Adelina Martínez en un momento de su exposición.



 
Al acabar la actividad  "Pieza del Mes" tuvo lugar un concierto de Música Lírica “ Voz y Piano” a cargo de Dª Ana Castillo (Soprano) y Dª. Sandra Casanova (Piano). Organizado por la Asociación Camino de Santiago de Mansilla de las Mulas para conmemorar el XX aniversario de la declaración del Camino de Santiago como "Patrimonio de la Humanidad". Patrocinado por la Junta de Castilla y León y el Ayuntamiento de Mansilla de las Mulas y con la colaboración de la Diputación de León y el Museo Etnográfico Provincial de León.
 
Dª Ana Castillo y Dª Sandra Casanova.


 
 

viernes, 6 de diciembre de 2013

COLABORACIÓN: TIERRAS AMIGAS: Rueda del Almirante

Autor: Toño Morala
Vista aérea de Rueda del Almirante

A veces uno quiere satisfacer su curiosidad por la historia de algunas tierras amigas. Tierras que hacen pueblos llenos de gentes anónimas, de gentes que son las que realmente hacen historia; esos hombres y mujeres que a través del paso del tiempo y dándole de vez en cuando la espalda, han sido capaces de crear las formas más humanas  y simples y siempre pegados a los recursos naturales del entorno y sus características. Siempre mirando por el medio de donde se come y de donde comen los animales para la sobrevivencia. Esa magia racional que ayuda a entender el medio rural no como un medio de vida exclusivamente, si no como algo tan natural… que uno sabe que pertenece y nace en estos lugares tan pintorescos y bonitos. Y de esa manera se van creando las formas más sencillas y discurriendo mil útiles para favorecer al trabajo  y el tiempo que quede para crear cultura: los mitos, los ritos, las leyendas, y así, poco a poco, se van forjando pueblos llenos de encanto a base de duro trabajo, y pueblos llenos de gentes buenas y bondadosas. Y de esas ganas de conocer entornos y nuevas gentes, uno se adentra en las carreteras y bajo la observación como vía para llegar a contar cosas, el que les escribe ha llegado en este caso a Rueda del Almirante.
Trillo mecánico de Aurentino
El hilo conductor siempre es la paciencia y una mirada alta y larga, y ese silencio que acaricia las tardes del otoño; de esa manera encontré la excusa para adentrarme en este precioso pueblo a través de una máquina con pinta de ser de Maquiavelo; pero nada más lejos de la realidad. En realidad es un trillo mecánico de por allá los años sesenta. Menudo encontronazo para empezar a preguntar a los pocos mayores que van quedando  en el pueblo… y así, tirando  de palabras y sonrisas cómplices, llegué a la casa del dueño de semejante joya etnográfica, a pesar de no ser tan antigua. Ahí comenzó la historia que les voy a contar.
Pedro, padre de Aurentino en la majada.
Aurentino es hijo del que fuera pastor de un rebaño de ovejas, de Pedro y de Enedina, dos buenos seres humanos  que nacieron y sacaron a su prole adelante en Rueda del Almirante, y aquí comenzó la tertulia bonachona con Mari Mar, una de las hijas de Aurento (que así llaman a este buen hombre en el pueblo y sus familiares). Mari Mar me cuenta por encima la historia del trillo mecánico y a la vez me enseña su casa: la cocina caliente por la económica de carbón y leña; la número siete lleva años dando calor y haciendo unos pucheros impresionantes.

Cocina económica
La panera llena de reliquias antiguas, la cocina horno con su armario de madera pintado, sus ollas rojas de San Ignacio, las cestas de mimbre…un añadido con una larga mesa llena de buenos níscalos, y al  fondo una parra dentro de la construcción.


También cuenta la casa, que es una de las más antiguas de Rueda del Almirante, con unas zapatas de noble madera, pilares antiquísimos, dinteles y vigas. Y entonces comienza un leve paseo por el pueblo y se va encontrando uno con restos de murallas y el viejo castillo, el mirador impresionante desde donde se otea toda la inmensidad de gran parte de la ribera del padre río Esla y la bonita Iglesia de Santa María con sus dos capiteles  mozárabes  procedentes  de  Escalada.  Ese ventanal gótico tan precioso y preciso.


Ventanal gótico de la iglesia de R.Almirante

Más al costado superior, encontramos una bonita casa con el horno exterior y su magnífico portalón;
Casa con horno exterior

 pero la joya está por llegar…uno atisba desde lejos una bonita fuente con un pequeño arco de piedra que es de origen románico.
Fuente Romana de Rueda del Almirante
 Otra fuente escondida en el paraje denominado valle de Carbajal y que tiene mil anécdotas y leyendas, es la fuente de las Doncellas. Una de ellas es  aquella… “En la guerra del Rif, en el año 1921, a un soldado de Rueda del Almirante que sirvió allí al rey, le dijo un jefe moro que, entre los papeles antiguos que él conservaba había uno que hacía referencia al tesoro escondido por el califa musulmán en un lugar de Rueda, cuando tuvo que marchar perseguido por los cristianos, y que el tesoro estaba al pie de una fuente, consistiendo en gran cantidad de oro y monedas”.
Fuente de las doncellas
 Efectivamente, allí en el valle de Carbajal se halla la Fuente de la Doncella, de fría y cristalina agua que apaga la sed de los pastores. También presta  un recuerdo santiaguista. Nano, nieto de Lucinio y Demetria  es el que limpió la bonita fuente y me acompañó hasta su nacimiento. Pero no acaba aquí este bonito paseo. También se puede visitar la cueva de la Caseta (catalogada como neolítica). Por todo el recinto que fue amurallado se encuentran casas de adobe sobre peñas altaneras, cuadras y pajares que albergaron ganados y mies para el año; y no hay que olvidar el maravilloso soto; la vega  debajo del pueblo que tanta remolacha, patatas, hortalizas de todo tipo ha dado, como también madera y buen trigo.
Sobre peñas se abrazan los adobes entre sí
y hacen pajares, cuadras y casas.
 Desde el siglo XV al XVIII ostentaron el señorío de Rueda los Almirantes de Castilla, y luego pasó al ducado de Alba. En los citados siglos pertenecieron a la Villa y Tierra de Rueda los siguientes pueblos: Rueda, Villalquite, La Aldea del Puente, Sahelices del Payuelo, Villamondrín, Quintanas de Rueda, Valdepolo, Villaverde la Chiquita, Quintana del Monte, Villahibiera, Herreros, Llamas, Sahechores, San Cipriano, Cubillas, Vega del Monasterio, Quintanilla, Palacios, Santibáñez, Carbajal, Villacidayo, Villanófar, Gradefes, Nava de los Caballeros, Valdehalcón, Garfín, San Bartolomé, Valporquero, Cerezales, Cañizal, Valduvieco, Mellanzos, Santa Olaja de Eslonza, Villarmún, Vallejo, San Miguel de Escalada, Valdabasta, Cañones, Casasola, Cifuentes y Valdealiso. Podríamos citar algunas fechas históricas y de personajes, pero lo dejamos  para los estudiosos  y para los que les interese más la literatura histórica. Seguimos con este paseo magnífico y también lleno de memoria; así nos encontramos con este poema antiquísimo… “La Cena del Almirante” que dice… A los Almirantes solía esta Tierra regalar perdices, manzanas camuesas, truchas, empanadas y fina manteca  desque don Fadrique un día de fiesta dijo:"Mis vasallos de tierra de Rueda, traedme, os ruego, una buena cena si queréis ganaros mi benevolencia; que no haya probado otra como ella, ni más agradable ni mas suculenta, ni mejor servida por guapas mozuelas".
Y no queremos acabar sin invitar a visitar este magnífico lugar, estas maravillas que nos causan una fértil imaginación y nos deja ese esplendor y su sombra de grandeza. Rueda del Almirante, tierra amiga.