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V. araujo | Villablino 13/10/2013
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| El pulpo volvió a ser la estrella gastronómica de la feria. Araujo |
El tradicional mercado que celebró ayer la capital lacianiega conocido como la Feriona congregó a miles de personas. Aunque el tiempo acompañó, con sol y temperaturas agradables y al caer en sábado la participación fue alta, las ventas disminuyeron notablemente respecto a años anteriores debido a la situación económica tan delicada que están viviendo las familias de la comarca, según reconoció el concejal de Ferias y Mercados del Ayuntamiento de Villablino, Mario Rivas
Los mineros de interior del grupo Alonso no perciben sus salarios y los cielos abiertos se encuentran en situación de expediente de regulación de empleo (ERE). Además, también se les adeudan nóminas.
Por otra parte, el recinto ferial de las Rozas albergó una exposición morfológica de razas puras, en la que se pudo ver reses vacunas, equinas, ovinas, ejemplares de mastín español y diferentes razas de gallinas, en donde «el éxito de participación fue patente e incluso se llegaron a realizar transacciones», destaco el edil. La Feriona congregó a un total de 800 puestos ambulantes de diferente índole y de diversos puntos de la geografía española que se colocaron por las calles Constantino Gancedo, avenida del Bierzo y sus adyacentes, en donde se podía encontrar productos textiles, artesanía, ferretería y gastronomía, especialmente las pulperías que preparaban el típico pulpo a feira regado por un buen vino, al igual que en los restaurante y hogares lacianiegos.
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