sábado, 10 de octubre de 2009

Arquitectura tradicional culta leonesa.


Por Luis Miguel Vila. Licenciado en Historia.

La Carta del Patrimonio Vernáculo Construido (ICOMOS 1999) define que el Patrimonio Tradicional Construido es la expresión fundamental de la identidad de una comunidad, de sus relaciones con el territorio y al mismo tiempo, la expresión de la diversidad cultural del mundo. Cuando uno recorre la provincia de León y se queda maravillado por las casas tradicionales que aún se conservan inmediatamente surge la inquietud de la necesidad de una arquitectura tradicional culta leonesa, es decir, edificaciones con proyecto arquitectónico, que pueda aplicarse a restauraciones de casas tradicionales, a las casas de estilo tradicional de nueva planta y casas modernas con elementos tradicionales.
En otras regiones españolas, el caso de Cantabria es sorprendente, en construcciones tan modernas como chalets adosados son fácilmente reconocibles una serie de detalles de su arquitectura tradicional que se repiten invariablemente, unos literalmente y otros reinterpretados, y que constituyen una arquitectura diferenciada con personalidad propia y que sirve como un elemento de autoestima enormemente eficaz para sus gentes.
La tipología de la casa leonesa es algo más difícil de definir ya que en León ha predominado la evolución desde la casa terrena del siglo XVIII, que en la mayoría de los casos constaba de una cocina donde hacía toda la vida una familia, y que evolucionaba como un elemento orgánico que iba creciendo según aumentaban las posibilidades económicas de la familia con la adenda de otras estancias.
En qué podemos colaborar o trabajar para hacer reconocible esta arquitectura tradicional leonesa y que tenga una coherencia de estilo, forma y apariencia; básicamente en la preservación de los volúmenes, en el uso de los materiales de construcción que siempre hemos tenido a mano; mampostería, pizarra, canto rodado, adobe o tapial, revocos o trullados de barro, este último en múltiples manifestaciones con el que se construyen edificios de lujo en muchas partes del mundo tan dispares como California o Marruecos y que ha sido usado por arquitectos tan revolucionarios como Frank Lloyd Wright, es por ello paradójico que una inmensa mayoría de los leoneses asocien la construcción en barro a la miseria y a unos modelos de vida ya superados que hay que eliminar de la memoria, sin embargo, si vamos consiguiendo que progresivamente vean sus casas en libros, exposiciones y medios de comunicación les hará ver éstas como algo a valorar y a conservar.



Otros elementos característicos de la arquitectura de esta provincia son visibles en las fachadas en forma de corredores, lo primero que singulariza la casa tradicional de León, ya que casas con corredor hay repartidas por toda la geografía leonesa. Estos corredores se manifiestan en la fachada principal abiertos y cerrados a modo de galería, con o sin tornapuntas. También son de una calidad estética notable los corredores interiores con portalinas (corredor sobre un pórtico) en la parte posterior de la casa. Es recomendable el uso de tejas y losas acordes con el entorno, los colores tierra tan cálidos de las fachadas y que tanto mimetizan las edificios de los pueblos con el paisaje circundante, un particular acierto son las casas agrarias de la Ribera con balcones o corredores y las casas de Tierra de Campos, sólo hay que darse un paseo por Santa María del Monte de Cea, un pueblo que emerge como fruto nacido de la tierra, para valorar su personal encanto. Particularizan también en otras comarcas leonesas las escaleras de acceso exterior de piedra o patines, los testeros resaltados y escalonados con grillandas y, por supuesto, la creación de evoluciones particulares de cada uno, ya que la tradición no es una cuestión estática sino dinámica y continua, no sólo hicieron tradición nuestros abuelos sino que nosotros la estamos haciendo también ahora. La reproducción de estos elementos arquitectónicos tradicionales en nuevos proyectos es una manera de equilibrar la imparable pérdida de estas construcciones por toda la provincia y lo que esto supone de herida para la cultura leonesa.
Los arquitectos leoneses tienen un importante papel en la posibilidad de sugerir estas tipologías, elementos distintivos y materiales autóctonos en edificaciones de nueva planta, ya Vitrubio, arquitecto romano del siglo I a.C. en sus “Diez libros de arquitectura” alabó la tierra cruda para construir todo tipo de edificios, palacios incluidos, a pesar de la dificultad que se les presenta por la omisión de este material en el Código Técnico de la Edificación de 2007 que descarta a priori enormemente su uso práctico en las nuevas construcciones al no poder ser homologados por las empresas de control de calidad para los seguros decenales obligatorios, con la particularidad sorprendente que el barro está incorporado ya en muchos códigos técnicos de otros países.
En el fondo se trata de convertir nuestra arquitectura tradicional en un espacio o lugar de vida contemporáneo que a su vez es una remembranza de la historia de nuestras raíces y cultura. Es el compromiso de la gente con su tierra, su tradición y su patrimonio tangible e intangible un símbolo del progreso de los pueblos.

1 comentario:

  1. Magnífico artículo de opinión, que inicia la participación en el blog. Ni que decir tiene que suscribimos éste, y la llamada de atención sobre el presente y el futuro de la arquitectura, adaptada y sostenible, a la vez que seña de patrimonio identitario leonés.

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