C. COMPADRE . Diario de León . 20/08/2011
Un año más ha tenido lugar en la localidad de Murias de Paredes la recreación de las Majas Tradicionales de los pueblos de Omaña, a la que acudió una gran afluencia de público.
Con motivo de la celebración de las IV Jornadas de Memoria y Tradición, organizadas por el Ayuntamiento de Murias y la Asociación Cultural Ecos de Omaña, se rememoró el pasado jueves la labor agrícola de las majas. En Murias, tan sólo por un día, se vuelve a majar el grano y se escucha de nuevo el sonido de los pertiegos.
Tradicionalmente, las majas se realizaban a finales del mes de agosto y tenían como finalidad separar el grano de la paja.
La labor se llevaba a cabo entre varios vecinos, que aprovechaban la tarea como un momento más de reunión.
Para que la labor fuera exitosa, eran varios los vecinos que golpeaban la paja y el grano de manera coordinada y por ambos lados; lo hacían con los llamados pertiegos.
Los pertiegos eran instrumentos que consistían en dos palos de madera unidos por una cinta de cuero.
Una vez separados la paja y el grano cada uno de ellos estaba encaminado a un fin concreto. Así, la paja se escogía de modo que quedara lista para techar las viviendas o bien alimentar al ganado. Posteriormente, se limpiaba el grano y se le quitaban las impurezas lanzándolo al aire y mediante el uso de una máquina llamada limpia. Para terminar con la labor y volver a los quehaceres diarios, cada familia recogía la parte del grano que le correspondía.
La maja, al igual que otras labores agrícolas, era parte de la vida cotidiana de aquellos que habitaban en el medio rural en otro tiempo. Además de formar parte del trabajo que se debía realizar en el entorno rural, era otra de las muchas formas de reunión para los habitantes de la localidad, donde se compartían momentos no menos importantes que los filandones.
Murias de Paredes permite revivir esta tradición rememorando viejos tiempos.
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