MAURICIO PEÑA
P.J. Abajo / CastrotierraLa Virgen de Castrotierra abandonó ayer la Catedral de Astorga para regresar hasta su templo valdornés acompañada de unos 80 pendones y cerca de 30.000 personas en lo que fue una comitiva con más de tres kilómetros de longitud. Como manda la tradición, la vuelta a casa de la Virgen de la Lluvia fue una cita en la que la devoción y el ambiente festivo fueron la nota dominante para acabar con una jornada de romería, donde la intención de suplicar el agua del cielo para el campo leonés mueve a miles de almas de las comarcas que rodean las ciudades de Astorga y La Bañeza.
Así, después de haber permanecido desde el pasado viernes 11 de mayo en la seo asturicense para celebrar un novenario, fue durante el día ayer, con las primeras luces del día y al término de la eucaristía de despedida, cuando la imagen abandonaba la capital astorgana para recorrer los 19 kilómetros que separan Astorga de Castrotierra por el Camino de la Virgen, un trazado que surca tierras de la Sequeda y de la Valduerna y donde apenas un descanso de media hora a mitad del trayecto en una gran pradera sirvió de respiro a los romeros.
Durante las más de seis horas de peregrinación, los participantes en la rogativa que acompañaron a la Virgen a lo largo de todo el camino –y los que se fueron sumando durante el trayecto– fueron siguiendo a la hilera de colores compuesta por cerca de 80 enseñas de numerosas localidades de la provincia, además de los cánticos litúrgicos y rezos dirigidos por sacerdotes de los arciprestazgos de La Bañeza y Astorga.
Durante los días que permaneció la Virgen del Castro en Astorga, por la Catedral pasaron los devotos de las zonas de la Cepeda, Maragatería, Cabrera, Valduerna, Sequeda y Ribera, además de las cabeceras de comarca, que también tuvieron sus días para venerar a la Virgen y presentar ante ella súplicas espirituales y materiales acompañados de varios párrocos de las localidades pertenecientes a estas zonas, algunos de los cuales concelebraron ayer la eucaristía junto al obispo y el vicario general de la Diócesis.
En su homilía, el prelado asturicense agradeció a los Procuradores de la Tierra sus “importantes esfuerzos durante estas semanas para acompañar a la Virgen en la Catedral, así como para organizar la salida en rogativa y la vuelta al santuario”. La celebración religiosa, que se llevó a cabo en el exterior del templo dada la importante concentración de devotos, estuvo presidida por la imagen de la Virgen del Castro y por los dos pendones de la localidad; mientras, miles de personas fueron preparando la parte social de la jornada en la ladera y los aledaños del santuario, donde cientos de familias y entidades compartieron mesa y mantel ante una ligera caída de la lluvia que da sentido a la propia celebración.La cronica de leon.es/2012/05/21/leon fervor popular y fiesta en la vuelta a su templo de la virgen del castro
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